Visión 11.4.25. Efecto Pigmalión

Visión 11.4.25. Efecto Pigmalión 

Siendo el subconsciente una red, es imposible que no aparezcan de pronto los "puntos de inflexión", zonas de hipodensidad en las que no sabemos qué o cuáles decisiones tomar, la mente se atora por mucho tiempo en ese leve espacio y genera una niebla que a veces, solo con el tiempo podemos volver a entrar y disipar. 

Y yo había vuelto a una de esas zonas, había vuelto a una relación del pasado que aún en el presente me era difícil de recordar, me había costado mucho de mi tiempo soltar aquella historia, porque temía causarle daños a terceros.

Pensé demasiado las cosas, no sabía cómo decirle que no podía sentir lo mismo que sentía por mi, así que hice un viaje hasta su casa creyendo que en el valor hallaría el amor faltante, pero ni siquiera el viaje, ni siquiera el valor le daba al motor del amor la fuerza para seguir avanzando en eso. 

Así que llegó el día, en el que esperé estar frente a frente, y ahí comenzó este viaje, el de esta visión que contaré aquí. 

Regresé en el tiempo, si, a ese día si, pero no al lugar. 

Me vi a mi misma en un espacio en el que me obligaba a estar con alguien que era todo lo que podía ser, y yo hubiese podido desear que fuese, pero sin embargo no podía sentir la misma frecuencia, al menos no de la forma en la que esa persona lo deseaba. Así que arrojé mis propios deseos al olvido, y ahí comenzó ésta innecesaria fragmentación:

Cada vez que nos obligamos a hacer algo que no deseamos, estamos nadando en contra de las corrientes más poderosas del universo, porque el universo es movido por las corrientes del corazón, y el corazón es un niño que desea siempre, sin la más mínima intención de desistir en eso que desea hasta que esa inmensa espectativa "choca" contra una naturaleza inamovible, como una "máquina" por ejemplo.

En muchas ocasiones, esa "máquina" simplemente está ahí justo frente a una puerta como una gran esfinge, a veces de la aparente nada, llega y destruye el camino en el que nos habíamos colocado a nosotros mismos por querer huir del deseo, porque "El Deseo" es "el guión" de esta película llamada "Vida".

"DESEAR ES LO QUE MOLDEA LA REALIDAD EN LA QUE FLOTAMOS"

La Madre Tierra había deseado ser un planeta lleno de vida, había deseado ser madre, ser exquisitamente variada en su corazón, en su creación, en su amor; por eso dió a luz tantas clases de seres, tantas clases de vida, y tantas clases de amor. TODO cuánto deseó se había cumplido. 

Porque en la mente de la gran madre, no había nada que le dijera que no podía desearlo, aún cuando no hubiesen los recursos, ella en su deseo infinito era capaz de atraer desde la abstracción los recursos necesarios para lograrlo; cometas, meteoros, gases ...elementos. 

Así, cuando nos alejamos del deseo porque creemos no tener los recursos necesarios para conseguir el objeto del deseo, estamos renunciando al orden de esta matriz cósmica, a su dirección, a su gran espiral. Nos salimos de sus corrientes y sentimos la vida como algo "difícil" solamente porque vamos en contra de sus vientos. 

La humanidad entera a creado una "contra-corriente", una polaridad adversa que repele en vez de acercar, esa polaridad adversa de la Tierra, se llama "MIEDO".

Miedo a desear por creerse "insuficiente", "erróneo", "loco", "pobre" o "carente" de algo que se interpreta como necesario para alcanzar el objeto del deseo. 

-Pero, cómo va un ser creado por todo lo necesario, sentir que no tiene lo necesario para desear lo que solo parece "imposible"?- me preguntaba a mi misma, una y otra vez, mientras miraba a esta persona intentando atraerme una y otra vez hacia su núcleo, sin lograr que yo sintiese lo que tanto deseaba. 

Se trataba de una "ecuación de deseo" anti-natural la que esa persona estaba realizando, o era solo un tema de composición química?

Y entonces recordé algo ..."La Capacidad Negativa": todo se mantiene inmóvil hasta que se es mirado con espectativa. 

Qué era entonces "La Espectativa" ...Fé, acaso?

En esencia, la expectativa es una anticipación, una creencia o una suposición sobre la probabilidad de que ocurra un evento futuro o de que algo (o alguien) posea ciertas características o se comporte de una manera determinada.

No es una certeza, sino una proyección mental basada en información previa, experiencias pasadas, deseos, miedos o análisis lógicos (o a veces ilógicos). Es mirar hacia adelante, esperando (con mayor o menor grado de convicción) un resultado específico.

Entonces, ésta persona que me había "deseado" podía haberlo hecho desde el efecto "Golem" y no desde el "Pigmalión", claro está, había generado dudas en mi, de que yo fuese la persona que buscaba, y evidentemente yo le devolvía "el favor" rechazando de alguna manera su energía, pues no venía desde la confianza y la paciencia. 

O quizá al "darme vida" tal cual Afrodita había hecho con la escultura "Galatea" de Pigmalión, solo nació una vida "hueca" que llenaba su vacío, pues la clase de expectativas que se tengan acerca de algo, es lo que abre la puerta al tipo de deseo, el deseo puede solo cubrir una necesidad, o puede ser el disparador hacia la creación de todo un nuevo universo. 

Ahora me quedaba muy claro una cosa, jamás volvería a espectar mis deseos desde la necesidad de sentir algo o tener algo, sino más bien desde el poder que me da la vida para crear algo desde cero, aún cuando ni siquiera cuente con los recursos para hacerlo. 

Hallaré los recursos, derramaré sobre mí la gracia, el perdón, y las oportunidades necesarias para convertirme en una creación firme, consciente y definida para mí misma. Sin duda alguna, eso debía ser suficiente para cualquier otro ser, para el universo que hábito y para el que aún no he explorado. 

Con amor ...de una Magā